Me encantaría empezar este capítulo contando una corta anécdota de una paciente de 23 años que se dio cuenta, gracias a nuestro programa de educación Escuelas Familiares de Diabetes, la cantidad de rabia, frustración y rencor que tenía en su interior porque sus padres nunca le apoyaron en su condición. Porque se sintió muchas veces rechaza por su condición.
“Mis amigas siempre me insistían en ir a comer con ellas lo que ella comía y me ofrecían lo que yo no podía comer”.

En Colombia, en las regiones especialmente, ya que es donde menos educación al respecto hay, las personas celebran el decir “cómase eso que no pasa nada”, “una vez al año, no hace daño”. “Mejor quédese en la casa porque allá no hay nada sin azúcar” y desconocen el poder tan negativo de estas expresiones y otras que pueden desmoronar a un paciente emocionalmente.

Por eso para hablar de lo que necesitas de parte de tus amigos, piensa primero en qué es la amistad. Qué representa esa palabra para ti y a quién crees que deberías considerar llamar amigo.

Amigo, y sobre todo ahora, en este mundo virtual y de redes sociales, dista mucho del valor real de la palabra. Así que asegúrate de saber quiénes son tus reales amigos.

Porque lo que tú necesitas de tus verdaderos amigos es:

check box blueQue no te juzguen

check box blueQue no te vean por tu condición, sino por tus talentos.

check box blueQue te acompañen en tus días buenos y malos.

check box blueQue te cuiden dándote alternativas aptas para ti.
Y en este punto traigo el ejemplo de la droga. Amigo no es el que te dice “pruebe un poquito que no pasa nada”. Un verdadero amigo te trae fruta o productos sin azúcar, en lugar de gaseosa.

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Un verdadero amigo entiende lo que te puede pasar y toma un rol responsable frente a lo que le corresponde.

check box blueNo te sobre esfuerza si tú mismo no lo permites.

check box blueUn amigo real, tiene menús deliciosos y saludables sin azúcar para ti.

check box blueTe recuerda tus glucometrías y te motiva si no quieres aplicarte insulina.

Muchas personas pasan por nuestra vida, unos que creíamos amigos y nos hicieron mucho daño, otros que, sin pensarlo, se convirtieron en ángeles de nuestra vida.

La amistad es recíproca, pero depende del amor y valor que tengas por ti mismo para poder elegir personas invaluables a tu lado, que te hagan crecer y sentir mejor siempre que estás a su lado.